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"Qué seria de la vida si no tuviéramos el valor de intentar cosas nuevas?"
Esta es la vida de uno de los genios de la Historia del Arte. Una personalidad que tuvo que enfrentarse tanto a sus propios fantasmas como a un mundo que nunca lo comprendió. Y todo, para poder hacer aquello que lo realizaba vitalmente: pintar.
A caballo entre el delirio y la espiritualidad, esta pieza nos relata la pasión, muerte y resurrección de Vincent Van Gogh, el mal llamado "Cristo de las minas de carbón" que tuvo una vida intensa, que "soñaba que pintaba y entonces, pintaba sueños" y que nos mostró, entre otras cosas, que los frutos de aquello que sembramos no siempre los recogemos en vida. Porque, a pesar de todo y, aunque estemos convencidos de lo contrario, siempre somos y seremos relevantes para alguien.
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